Si el cambio climático ha puesto el foco en la necesidad de reducir el consumo energético, la crisis de la energía y la consiguiente subida de los precios, ha venido a reafirmar la convicción de que tenemos que ser mucho más eficientes si queremos proteger nuestro entorno y también nuestro bolsillo. De hecho, el 98 % de los españoles es plenamente consciente de la urgencia de buscar modelos energéticos más sostenibles, como la energía solar, así como nuevas fórmulas para que sus hogares sean cada vez más eficientes y ecológicos.
Pero ¿qué es una vivienda eficiente? Son aquellas casas que son capaces de reducir el consumo innecesario de energía, las emisiones de gases de efecto invernadero y la demanda de recursos no renovables, al tiempo que favorecen comportamientos más sostenibles y un ahorro importante en la factura energética. La incorporación de materiales aislantes térmicos, el uso de fuentes de energía renovables o los sistemas de almacenamiento de electricidad son algunas de las soluciones que se están incorporando a las viviendas, pero hay muchas otras características indispensables para conseguir que nuestro hogar sea eficiente y ayude a proteger el medioambiente.
Cómo conseguir una vivienda más eficiente
1. Buenos aislamientos
Tener un hogar que no está bien aislado es igual a tirar la energía por nuestras puertas y ventanas. De hecho, se puede perder hasta un 30% de dicha energía. Es preciso revisar todas las juntas y cerramientos por si hubiera alguna grieta o espacio. Uno de los grandes pilares de la eficiencia energética en un hogar es el buen aislamiento de paredes, techos, puertas y ventanas. Durante el invierno te ayudará a reducir al mínimo el uso de calefactores y en el verano el de los aires acondicionados.
2. Electrodomésticos Eco
Los electrodomésticos son, muchas veces, otros de los grandes impedimentos si queremos promover en nuestros hogares un consumo responsable. Cuanto más antiguos sean más consumirán. Por tanto, para mejorar la eficiencia energética en nuestra vivienda, nuestros electrodomésticos no deberían tener más de 10 años. Los modelos actuales con etiquetas A+,A++ o A+++, garantizan un mínimo consumo de energía. Por otra parte, a la hora de adquirir pequeños electrodomésticos, como secadores o planchas de pelo, deberíamos optar por aquellos más eficientes y optimizar su uso.
3. Calefacción eficiente
Según el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, el 50% de la energía que consumimos en una casa es para calentarla. Por ello, si queremos mejorar la eficiencia energética de una vivienda, es fundamental que el consumo de su sistema de calefacción no sea elevado. Debemos optar por aquellos más eficientes y utilizarlos correctamente. Por ejemplo, la temperatura se puede ajustar a las distintas franjas horarias del día, según las necesidades, apagar la calefacción por la noche y nunca dejar que supere los 21 grados. Hay que tener en cuenta que por cada grado que pase esta cifra, se incrementará en un 7% el consumo energético.
4. Iluminación adecuada
La iluminación de nuestros hogares supone el 10% del consumo eléctrico de los mismos. Por ello, no solo debemos tener en cuenta el número de bombillas o fuentes de iluminación y el uso que le damos, sino también el tipo que instalamos. Las de bajo consumo o las Led son las mejores opciones. Las primeras consumen un poco menos pero también tienen una vida útil considerablemente más baja y no debemos olvidar que debemos tratarlas como residuos peligrosos, pues contienen gases contaminantes.
5. Autoconsumo eléctrico
Aunque a muchos todavía nos parece casi de ciencia ficción, el autoconsumo eléctrico no solo es sencillo sino también muy rentable, pues podrás reducir tu factura de la luz hasta en un 50%. Aunque el uso de la energía eólica todavía es muy reducido, cada vez son más las viviendas en las que se instalan placas solares. Existen diferentes modalidades para la instalación de estas placas, desde el mero uso de una instalación, que pertenecerá a la compañía eléctrica, previo pago de una cuota mensual, a la adquisición que te permitirá ser el propietario de toda la instalación y generar tu propia energía para siempre.
6. Control del agua
Las largas duchas o los programas de lavado largos no solo desperdician agua sino también cantidades ingentes de energía. El proceso de calentamiento del agua, que utilizamos para ducharnos o lavar los platos y la ropa, consume muchísima más energía de lo que podríamos imaginar. Por tanto, toma duchas cortas, cierra el agua cuando te estés enjabonando y no pongas lavavajillas o lavadoras medio vacías. Además, los sistemas de doble pulsador o descarga parcial en las cisternas o la instalación de grifos monomando o con aireadore, nos ayudará a conseguir la máxima eficiencia energética en nuestras viviendas.
Comprometidos con la eficiencia energética
En Firmus Homes estamos plenamente convencidos de la necesidad de implementar en nuestras promociones todo aquello que ayude nuestros clientes a hacer un consumo responsable de la energía. No debemos olvidar que el consumo energético de los edificios supone alrededor de un 30% de las emisiones contaminantes de CO2.
Es por ello que la eficiencia energética de nuestras viviendas se ha convertido en uno de los principales pilares de nuestro trabajo. La orientación de los edificios, los aislamientos de alta intensidad, la instalación de placas solares o la inclusión de ACS por aerotermia, son solo algunas de las muchas acciones que incluimos en nuestros proyectos, para poner nuestro granito de arena en pro de la sostenibilidad y el cuidado de nuestro entorno. Además, somos plenamente conscientes de que la reducción de las necesidades de climatización o de consumo energético no solo tiene un impacto positivo en el medio ambiente, sino también en las facturas energéticas de nuestros clientes.