Tanto si quieres comprar como vender una casa, la premisa básica para iniciar el proceso es saber el precio de venta y si este está ajustado al mercado. Una duda que sólo podrás resolver haciendo una tasación de la vivienda. Pero ¿basta con una valoración gratuita o deberíamos hacer una tasación oficial del inmueble? Esta es una pregunta repetida casi en cada operación de compraventa y por ello hoy queremos profundizar en las diferencias entre estas dos opciones, para que pueda elegir la que más te conviene.
Conoce los dos tipos de tasación de una vivienda
Para comenzar debemos tener claro a qué se refiere cada tipo de tasación. La tasación oficial es un documento legal en el que siempre participa un tasador inmobiliario y que se realiza para un fin determinado. Se hace siguiendo una metodología concreta y ha de cumplir unos requisitos fundamentales para establecer el valor del inmueble.
En cuanto a la tasación gratuita, lo primero que debemos saber es que no tiene validez legal. Además, puede realizarse sin la intervención de tasadores y solo teniendo en cuenta los datos básicos de la vivienda. Por lo tanto, la primera y principal diferencia entre los dos tipos de tasaciones es que una tiene validez legal y la otra no. Pero, además, encontramos otras variaciones que pueden ayudarnos a decidirnos por una u otra:
Proceso
Como hemos visto, el modo en que se hace una u otra tasación difiere fundamentalmente en que la oficial requiere necesariamente de la visita a la vivienda de un tasador inmobiliario, mientras que en el caso de la gratuita bastará con seguir un proceso online que no necesita la presencia de un tasador. Este tipo de tasación la suelen ofrecer los bancos o empresas tasadoras que nos envían un formulario online en el que deberemos cumplimentar los datos básicos de la vivienda, tales como la ubicación, el tipo de inmueble, la superficie, etc. Estos datos se contrastan con la información de las bases de datos de estos organismos y de las fuentes oficiales y se establece el valor aproximado de la vivienda.
En el caso de la vivienda es imprescindible la visita a la misma de un tasador, que comprobará el estado del inmueble y la situación registra y catastral y aplicará el método de valoración apropiado según la finalidad de la tasación. Tras un minucioso proceso elaborará un completísimo informe acerca del valor real del inmueble, incluyendo documentación gráfica y el certificado de tasación que resume los datos más relevantes. La tasación oficial solo la puede elaborar y certificar una sociedad de tasación homologada por el Banco de España.
Por su parte, el informe de tasación gratuita solo suele incluir el precio de mercado y una horquilla de precio máximo y mínimo.
Coste
Es otra de las grandes diferencias y la que, muchas veces, nos lleva a optar por la tasación sin coste, aunque no sea la idónea. La tasación oficial tiene un precio que suele oscilar entre los 300 y los 400 euros, según la política comercial de cada tasadora. Este precio depende de diferentes factores como los honorarios del tasador; la ubicación y tipo de vivienda; la documentación necesaria para la tasación; el tiempo empleado en tasar la vivienda o el método empleado para hacerlo.
Validez
La tasación gratuita no tiene periodo de validez determinado, pues es una valoración del precio del inmueble. Sin embargo, la tasación oficial caduca a los 6 meses, ya que se considera que el precio de la vivienda puede variar a consecuencia de la evolución y situación del mercado.
Tiempo
En el caso de la tasación gratuita, el proceso es mucho más rápido. Unos minutos bastan para recibir la valoración, desde el momento en que enviamos el formulario. En cuanto a la tasación oficial, se tarda aproximadamente una semana, ya que, desde que se solicita la tasación, el tasador ha de visitar la vivienda, elaborar el informe y enviarlo a los interesados. Además, existe un plazo limitado de dos meses máximo desde que el tasador visita el inmueble hasta que realiza y envía la tasación.
Cuándo se exige una tasación oficial
Hay casos en los que decidirse por una tasación oficial no es una opción sino una obligación. Es el caso de las garantías hipotecarias de crédito o préstamo. Si necesitas pedir una hipoteca sí o sí deberás recurrir a una tasación oficial, ya que es la única válida para los bancos. Otros supuestos en los que deberías recurrir a esta tasación oficial es cuando se quiere saber el valor de un inmueble para una compraventa o permuta; en las adjudicaciones de subastas; las revisiones catastrales o los procesos de herencias, separaciones o divorcios.
Solo cuando necesitemos saber el valor de una vivienda para una compraventa entre particulares, será válida la tasación gratuita que nos dará el precio de mercado con el que podremos ajustar el precio de venta o compra del inmueble.
En el ámbito de la empresa será necesaria una tasación oficial para conocer el valor de los inmuebles de la sociedad a efectos contables; para valorar, frente a la administración, el valor de sus inmuebles a efectos de liquidación de impuestos; para la constitución y disolución de empresas; en situaciones de quiebra empresarial y suspensión de pagos; en procesos de fusión y escisiones o en embargos y trámites registradles.
